Actualmente el mercado ofrece miles de alternativas de selección frente a cualquier tipo de producto o servicio, es por esto que: la mejor calidad, el mejor servicio o somos el número uno, son términos que hace un tiempo están mandados a recoger, hoy en día en toda empresa todo esto debe ser un hecho, una acción efectiva para beneficio del cliente.
Hoy las compañías exitosas y preferidas por el mercado son aquellas que desde hace ya un tiempo han entendido que al cliente se conquista llegando a su corazón y no solo a su mente, son las empresas que ya han entendido que el ser humano vive de recuerdos y de experiencias. Las empresas exitosas actualmente, se han convertido en marcas.
Y hay que entender muy bien que una marca no es únicamente, un logosímbolo, un eslogan, una identidad corporativa o una hermosa fachada, una marca es un todo, es la «humanización» de lo que la empresa hace, es la percepción que tiene de ésta la gente, sus colaboradores, su gremio, y ella misma. Una empresa se convierte en una marca cuando logra vínculos emocionales con su público objetivo, cuando llega a su corazón y cuando le ofrece experiencias positivas para su vida, una marca va más allá de vender, busca una relación.
Y es aquí cuando comienza la gestión de marca, cuando una empresa quiere convertirse en el «amigo especial»de su cliente, en ese amigo que habla a su manera y que siempre está allí para solucionar sus inquietudes, comienza cuando la empresa cuenta una historia con la cual se identifica emocionalmente su audiencia, a través de toda su comunicación visual, sus puntos de servicio o venta, sus centros de llamadas o su misma recepción, y cuando quiere ser ese amigo que habla con verdades.